miércoles, noviembre 18, 2009

¿Quieren ser senadores?

(IX de XII)
Una ficción post-ProReforma.

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En esta historia ficticia un profesor universitario discute con sus jóvenes alumnos el camino que deben seguir para llegar a senadores. Luego de explicar cómo era el congreso antes de la reforma surgen dudas sobre la cámara de diputados actual. El profesor pasa a explicar este punto.
- Para empezar la elección en la cámara de diputados actual es uninominal en lugar de por planilla. Lo que esto significa es que uno siempre sabe por quién está votando y a quién le está dando su apoyo. Esto establece una mejor conexión de representatividad entre el diputado y el pueblo que lo eligió.
- Y con eso se destruyeron los partidos políticos de antes y ahora hay mucho menos partidos – apunta Rodríguez.
- Muchos partidos se constituyeron solo para llevar diputados al congreso, nunca tuvieron una oportunidad real de conseguir la presidencia de la república. Se conformaban antes de las elecciones, conseguían una cuota de poder, cobraban la deuda política y usualmente desaparecían.
- Pero actualmente también hay partidos débiles – comenta Fuentes.
- Y así debe ser, poco a poco los partidos políticos van siguiendo naturalmente una senda que los lleva a aliarse y unirse con los partidos más fuertes, dependiendo de afinidades ideológicas y coyunturales. Los partidos que representan posturas radicales o extremistas usualmente permanecen pequeños porque no son capaces de renuncias a sus planteamientos y posturas rígidas, de forma que la gente no los apoya a menos de que asuma esa misma postura intransigente. Ahora bien, la mayor legitimidad que tienen los diputados, sin importar de qué partido son, gracias a que saben que cuentan con el apoyo de sus votantes, les ayuda a mantener su línea ideológica y a no aceptar compromisos que vayan en contra de sus principios.
- Antes el poder lo tenían en realidad los jefes de bancada ¿verdad? – Juárez es de los alumnos mayores del grupo y participa poco.
- Así es Juárez, como dije antes, el compromiso de los diputados antes de la reforma era con su partido y por tanto obedecían al jefe de bloque, pero gracias a que el voto uninominal les dio mayor legitimidad, ahora pueden obedecer primero a sus votantes y a su conciencia antes que a cualquier directiva partidista.
- ¿Y antes la gente no le reclamaba a los diputados?
- Les decían de apodo los “dipucacos” y todo mundo sabía que no tenía ningún sentido perder el tiempo escribiéndole al diputado para algo que no fuera pedirle empleo u ofrecerle soborno. Y si era para pedir empleo la gente sabía que no lo conseguiría a menos de que también le diera una parte de su sueldo. Yo se que ahora sentimos que es muy natural escribirle al diputado por el que votamos ya que precisamente a él y no a otro le dimos nuestro voto, pero antes, nuevamente gracias al sistema de elección por planilla, eso no se veía así.
- ¿Y qué pasaba con la división de poderes? – pregunta Juárez.
- Interesantísima pregunta, sobre todo porque la situación era muy grave y cambió drásticamente a partir de la reforma, hay mucho que hablar acerca de eso, así que lo dejaremos para la siguiente clase.
(Continuará)
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Nota: escribí esta "ficción" porque creo que hay que abordar y explicar a fondo lo relativo al senado y a la cámara de diputados propuesta por ProReforma, no es mi intención ponerme en el papel de "profesor", ¡comentarios bienvenidos!

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